jueves, 17 de febrero de 2011

Santamaría, Montalbán y el Barça


Murió el pasado día 16 el polémico Santi Santamaría en su restaurante de Singapur, víctima de lo que él mismo diagnosticó como “un bajón”, aunque cualquiera que, como yo mismo, no esté licenciado en medicina, no dudaría en calificarlo como infarto. Ante todo, no puedo sentir más que pena. Era una persona joven, que aún tenía mucho que ofrecer. Y que aprender, me temo.

Su muerte, que conjurará una febril, y espero que fugaz, batalla de hirientes opiniones en el inhóspito desierto televisivo de este mercado de aire llamado España, me ha recordado inevitablemente a la de Manuel Vázquez Montalbán; ambos barceloneses, uno y otro orondos, los dos temibles ante unos caracoles a la llauna, pares cardiópatas fenecidos en lejanas tierras orientales.

Y recordando los artículos del gran Vázquez (Montalbán, insisto), me he encontrado con una frase parida por su, siempre, espíritu crítico, allá por 1999:

“No quiero ni imaginar el día en que se retire Guardiola, a no ser que Xavi cuaje como representante en la Tierra de la raza futbolística catalana y sea el pollo del Prat del Barça”.

Pues sí Manolo. Xavi ha sido todo eso y mucho más. Y espero que, muy pronto, nos saque del atolladero hasta el que nos ha empujado el Arsenal de nuestro añorado (y anhelado) Cesc. Y que Santi, que es, ante todo, un grandísimo cocinero, te haga un hueco en su cocina. Força Barça.