lunes, 26 de mayo de 2008

Bárbaro



Ya hace tres años. Tres años, nada más. Tres mundos, tres siglos, tres lunas. Cuando llego él, el duende, mi vida, nuestras vidas, dieron un vuelco. Ahí estaba él, dispuesto a cambiarlo todo, como un minúsculo tirano que, bien temprano, pretendía que el sol girara a su alrededor. Crece deprisa, el duende. Lo hace con carácter, con firmeza y con esa sonrisa maliciosa que ya ha aprendido a contagiarme. Eres grande, hijo. Me enorgullece entrever que puntearás más estrellas que tu viejo.

4 comentarios:

  1. Parece que fue ayer cuando naciste y ya los tienes "cuadraos", tendrás a quién parecerte, jajajajajaja. Desde que naciste no se te ha ido esa sonrisa de la boca ni esa mirada pillina de creer saberlo todo. Pero tienes buen corazón en eso también tienes a quién parecerte. Te quiero sobri

    ResponderEliminar
  2. ¡Has cambiado el blog! Me gusta mucho

    Besos

    ResponderEliminar
  3. Hola, Jeru ...

    Efectivamente, he vuelto a cambiar la configuración del blog.

    Soy un culo inquieto, que le voy a hacer.

    Un beso desde Alicante.

    Antonio.

    ResponderEliminar
  4. Desde Mayo sin escribir.... ¡¡Eso no vale!! jejeje

    besotes

    ResponderEliminar